Dicen los meteorólogos que estos
últimos días hemos alcanzado algunas de las más altas temperaturas de los
últimos años. Se sabe que Murcia es una de las ciudades españolas con veranos
más achicharrantes. El sentido común aconseja evitar salir en la franja horaria
de mediodía.
¿Hace falta que os cuente quién
ha ido a Murcia dos veces en los últimos tres días? ¿Habéis adivinado por que
lugar mi cuerpo caminó, entre resoplidos y sudaeras, en las horas fatales?
Lo cierto es que podría no haber
visitado la ciudad panochera. Mis viajes no eran cuestión de vida o muerte (en
todo caso de la mía), y sí perfectamente aplazables. Pero… el gen absurdo que
domina mi ADN se impuso y allí estaba yo en Murciaquéhermosaeres, recordando
que olvidé (¿a qué parece la estrofa de un bolero?) coger un abanico. Lo que sí
hice en mis dos locas expediciones al vestíbulo del infierno (¿sabíais que en
Murcia hay un pueblo llamado Infiernos y otro denominado Purgatorio?), fue usar
el kit
de Murcia-verano. Dicho kit, estudiado a lo largo de varios calurosos
estíos, consiste en usar vestido fresco (da igual si se transparenta algo, el
sol provoca más que un cuerpo 10), sandalias con poco tacón (sí, habéis leído
bien, con poco tacón para caminar con rapidez por la versión asfalto del desierto de Gobi),
y un bolso con toallitas y perfume (el eau de mofett estimula negativamente la
pituitaria).
Leyendo lo anterior no creo que
nadie ose dudar de mi organización preventiva. Iba preparada para pasar calor y
lo asumía. Pero, si yo soy un ente absurdo, la meteorología se lleva la
medalla de oro, y me obsequió con un nublado de media tarde, que culminó en
impertinentes gotas de una lluvia que no llegó a eclipsar el calor (entre
nosotros, la lluvia caía con poco entusiasmo, como por cumplir ná más).
Y regresé a este lugar del
planeta donde me gano el pan y el chocolate, descubriendo que el autentico
campeón del absurdo era el conductor del autobús. Sentada y aterida, lamenté no
haber llevado las pieles de Ana Karenina o, al menos, una chaqueta. Yo, que soy
de Albacete y de frío entiendo, esta tarde viajé durante casi una hora en el
tiempo, y debí llegar con temperatura bajo cero al 28 de diciembre, día de los
inocentes (el aire acondicionado puede regularse lo sé). O eso, o
el conductor es un psicópata, futuro asesino en serie que planea matar a
cuantos cometan el atrevimiento de subir al icebus que maneja.
Jajajaja. Eres genial. Y, por lo tanto, lo que surge de tu pluma (bueno, de tu teclado) no puede ser menos. Queda patentado lo de "icebus" by Gondo.
ResponderEliminarUn abrazo repanochero
Sabes que no exagero que me viste bajar del "icebus" blanca como un personaje de Tim Burton y con la nube perseguidora de nuestros viajes a Murcia. Vale, vale... la nube gafe es mía jajaja.
ResponderEliminarBesos compañera.
La próxima lo denuncias. Los a/a no se deben poner por debajo de 24º, que es una temperatura estupenda para que se te quite la sudorina pero no se te congele la piel mojada.
ResponderEliminarBuenísimo el texto, niña. Me he jartao a reir. Si te sirve de consuelo hoy ha caído una "chupa" de agua del 15 y acto seguido el desértico clima de Madrizzzz se ha pedido un ron caribeño humidificando el ambiente y convirtiéndolo en un Madrid-tropical de tres al cuarto.
Dios mío, y yo fatal de la espalda con tanto cambio de presión...
Besazos calentorros.
Y en esta noche de julio hace un calor bestial, las estrellas se esconden, en la tele no ponen nada, estoy de mala leche, me duele la garganta (culpa del autobusero sin duda alguna) y... ¡¡¡¡ SIGUE SIN TOCARME LA LOTO !!!!
EliminarBesos inconformistas, ma belle.
Jajajajajjjajajajajajajajja te imagino, te imagino!!! yo sé que no soy persona de riesgo (viejos y niños), pero no salgo de mi casa por nada a horas de calor nononoo... vamos ni que estuviese Brad Pitt esperándome en la calle de al lado. No soporto el calor, es superior a mí y lo combato con continuos baños en la piscina... qué vida esta... jajajajajajaja.
ResponderEliminarUn texto fresco y divertido.(debe ser por el icebus)
Besos!!
Pues ayer repetí, Maite. Eso sí, en buena compañía ya que me acompañaban Auroratris y J.
Eliminar¡Lo qué nos pudimos reír! ¿Seremos de otro planeta?
Calurosos besos.
Esto se va pareciendo al anuncio de las natillas: repetimos!!!
ResponderEliminarQuerida, los foulares monísimos que mercamos son ideales para añadir al kit de Murcia-verano, siempre que vayas con el señor "autobusero"
Me has hecho reir de nuevo al recordar la tarde.
Un abrazo y ya sabes, mañana repetimos, jajaja.
Repetimos las veces que haga falta.
EliminarY ya sabes que yo tengo mi particular circuito de Gondo Aventures. La verdad no lo entiendo porque yo tomo chocolate del toda la vida, el de las tabletas jajaja.
Besos a la espera de las rescatadoras (que hoy toca encierro, ya lo sabes).