No sé qué demonios está pasando conmigo, pero el plomo que contaminaba mi alma está desapareciendo y el aplomo comienza a hacer acto de presencia.
Mi vida en estos momentos no es precisamente para lanzar cohetes pim pam pum congratulesions, pero amanece que no es poco y anochece en paz, que tampoco está mal. El pero lo pone mi neurona tocapelotas, que se pregunta qué ha pasado, cómo he llegado aquí, de dónde viene esta placidez. Ya os digo que es una neuri tocapelotas que va de listilla y todo lo quiere saber. Vamos a ver... meloncilla si estás bien, si te despiertas contenta (no en plan himno a la alegría pero con tralaralará suave), si disfrutas de un sol benevolente que además no te va sacar más pecas porque estamos en enero, si te ríes con la vida… ¿qué necesitas saber?
A estas alturas de la vida una ya tiene sus protocolos de seguridad, por tanto mis particulares hombres de negro han cogido a neuritocapé, la han amordazado y la vigilan estrechamente porque respuestas podría encontrar que no le habrían de agradar.
Y ya que, sin haberlo preparado, me ha salido un pareado, aquí lo dejo colgado.
Sed felices si las neuronas os dejan.
Disfruta ya de tu plácida vida y deja de preguntarte dónde está la cámara... Por cierto, pásese usted por mi blog a recoger una cosita...
ResponderEliminarhttp://analogiasdehoy.blogspot.com.es/2013/01/un-premio-cojonudo.html
Gracias ma belle dame.
EliminarPasaré no lo dudes.
Besos y abrazos.
Mis neuronas atrofiadas, virulentas, y no sé qué más. Ya te contaré, ya.
ResponderEliminarA disfrutar que ya toca, ma cherie.
Un abrazo.
Gracias Auroratris por comentar, por estar, por ser mi amiga...
EliminarBesos.