A veces me llegan fotos de otros lugares. Veo paisajes, que no huelo ni respiro, atrapados en un recuadro de la pantalla. Me llegan viajes en forma de historias; otras veces solo aparecen como la anécdota de un lugar dónde una vez se estuvo.
La gente viaja mucho. Desplazan maletas, mochilas, teléfonos y periféricos que les permiten conectarse con el otro extremo del mundo...
Hay momentos en los que también yo quiero viajar, pero hacerlo sin maletas, sin identidad, sin conexiones… Sueño algunos viajes, consciente de que hay otros que debo emprender.
Quién pudiera!!!!
ResponderEliminarA veces se consigue, otras, nos quedamos en un intento.
No desanimes, querida mía, ve haciendo el equipaje, todo puede pasar a partir de mañana.
Un abrazo, mi Jane.
Ligera de equipaje, mejor, querida amiga, aunque ya sabes tú que llevo el bolso que parece sacado del atrezzo del camarote de los Hermanos Marx jajaja. Y la mente ya ni te cuento.
ResponderEliminarBesos siempre, señora mía.